Ficha de partido: 29.09.1974: Valencia CF 3 - 0 Athletic de Bilbao

Ficha de partido

Valencia CF
Valencia CF
3 - 0
Athletic Club
Athletic Club

Equipos titulares

Timeline del partido

escudo local
Inicio del partido
0'
escudo visitante
Fernando Tirapu
38'
Descanso
45'
Sergio ManzaneraFernando Barrachina
45'
Astrain
46'
Quino SierraAsist: Salif Keita
47'
Salif KeitaAsist: Quino Sierra
58'
Pep Claramunt (Pen.)
62'
DaniLasa
65'
AmorrortuCarlos Ruiz
75'
Final del partido
90'

Estadio



Nombre: Mestalla
Aforo: 55.000 espectadores
Ubicación: Valencia (Valencia) 
Inauguración: 20/05/1923

Rival: Athletic Club

Records vs Athletic Club

Máximo goleador: Mundo Suárez (19 goles)
Goleador rival: Zarra (20 goles)
Mayor victoria: 5 - 0 (03.04.1949)
Mayor derrota: 0 - 7 (10.10.1954)
Más repetido: 1-1 (23 veces)

Crónica

Dos mitades absolutamente diferentes, casi dos Valencias completamente distintos son los que hemos visto, en este partido Valencia-At. de Bilbao, en que se enfrentaban los dos equipos qUe cerraban la clasificación, dos grandes que venían empequeñecidos en este comienzo de Liga que parece absurdo para ellos, teniendo en cuenta su historial, su tradición, sus posibilidades y sus efectivos.

En el primer tiempo, que terminó con empate a cero, el Valencia, que empezó jugando con brío rapidez y ganas se fue desvaneciendo poco a poco, incapaz de culminar el juego que brotaba de su medio campo y de traspasar la barrera defensiva que mostraba el Athletic bilbaíno.

El juego valancianista fue a menos y aunque el Athletic casi limitó sus aspiraciones a un par de contraataques, en ellos anduvo muy cerca de marcar. En la primera de esas jugadas, a los 34 minutos, Lasa, que la protagonizó junto con Carlos, el delantero centro, quien le sirvió en bandeja de oro un balón insuperable, remató a puerta cuando ya Balaguer debia considerarse batido. El balón, como si hiciera un guiño inesparado, rebotó en un poste y se malogró la mejor ocasión de gol que había de proporcionar ese primer tiempo. Poco después era Carlos en situación parecida quien desperdiciaba otra oportunidad.

El Valencia, que había dominado mucho, no había creado ni un sólo peligro. Su juego resultaba blando e inoperante al llegar al área de penalty y acabando ya esta primera parte surgieron de los graderíos los primeros siseos y muestras de disconformidad del público. Realmente no se apuntaba un buen panorama para el Valencia en este partido que debía brindar la reconciliación con su público. Tirapu fue amonestado por el árbitro con tarjeta blanca dos minutos antes del descanso y se alcanzó éste con el cero a cero, que no era nada prometedor.

Sin embargo, lo bueno vino en la segunda parte. Todo surgió por un cambio, un sólo cambio que se produjo en el Valencia. Se quedó en la caseta Barrachina y salió en su lugar Sergio, pero esta simple modificación originó también un cambio radical de estrategia en el once blanco. La defensa formó con Tirapu, Sol, Martínez y Cerveró, la media con Claramunt y Planelles, y la delantera con Sergio, Quino, Keita y Jara. Un 4-2-4 muy ortodoxo con sólo la flexibilidad que las circunstancias aconsejaran, pero con una realidad: la de que había más delanteros en línea para buscar el gol; y el gol llegó, vaya si llegó. A los 2 minutos el primero, marcado, por Quino. La jugada se inició en una falta de Astrain a Planelles que el árbitro, además de señalarla, castigó con amonestación al jugador bilbaíno. La sacó Claramunt, tocó el balón Keita y Quino lo llevó a la red desde muy cerca, burlando a Iribar. Era el 1-0 que modificó por completo el panorama.

El Valencia, animado con este tanto, se transformó en un equipo aguerrido, rápido y ambicioso que no dio cuartel a su adversario. A los 13 minutos, una jugada que inició en medio campo Planelles la culminaron Keita y Quino, al alimón, combinándose el balón entre para finalmente marcar el africano el tanto, un gol de verdadera antología.

Keita encontraba su tarde, y la culminaría poco después con una jugada de artesanía en que materialmente toreó a Iribar al sacarle del marco, burlarle por tres veces seguidas, para finalmente tirar a puerta y desvió un defensa bilbaino con el brazo. Penalty que el árbitro se lo pasó por alto, y que finalmente acabó en córner intrascendente. Pero un minuto más tarde, como si el árbitro quisiera compensar su omisión anterior, una entrada a Keita realizada por Guisasola y que no nos pareció en absoluto merecedora de castigo, la sancionó Franco Martínez con penalty. Penalty que ejecutó Claramunt con un trallazo alto y al medio del larguero, que dejó a Iribar inmóvil, como si ratificara la inutilidad de intentar nada.

Ahí se rubricaba el 3 a 0 con que el Valencia manifestaba su absoluta y total superioridad sobre el Bilbao, materializada en el segundo tiempo después de uno tan sólo discreto, sin definir sus ambiciones y sin superar al adversario. Total que el partido cambió y el Valencia ya animado y crecido, mantuvo su superioridad hasta el final, si bien en el último cuarto de hora el Bilbao hizo acto de presencia con unos intentos, más efectistas que efectivos porque, la verdad sea dicha, estos leones parece que vienen con las garras melladas y no ofrecen la menor peligrosidad para el adversario.

Total, que con esas dos mitades tan diferentes, el Valencia ha ganado al Bilbao y se ha reconciliado con el público. Arbitraje discreto, con la nota ya citada de omitir un penalty y señalar otro a nuestro juicio inexistente, del murciano Franco Martínez.