Inicio del partido

0'

Sánchez Jara

8'

Alfonso Pérez

11'

Jorge Otero

13'

Paco Camarasa

21'

Pier

25'

Arpón

30'

Patxi Ferreira

36'

Stosic

36'

Pepe GálvezAsist: Jose Ignacio Sáenz

40'

José Manuel Sietes

41'

Descanso

45'

Carlos ArroyoIomar Mazinho

54'

Paulo Sergio ViolaPepe Gálvez

62'

MenéndezJarni

67'

MárquezArpón

67'

Carlos Arroyo

71'

Paco Camarasa

81'

Final del partido

90'

El Betis alivió la goleada que le endosó el Barça en el Benito Villamarín con un trabajado empate en Valencia. El equipo de Serra Ferrer, diezmado por las bajas, dejó su sello de calidad en Mestalla ante un Valencia muy desdibujado en la primera mitad, pero que supo sobreponerse al gol adverso. El Betis pudo ganar (tuvo claras ocasiones para hacerlo) pero se fue con un punto que sabe a gloria. La primera parte fue suya, aunque el Valencia, en la segunda, también hizo sus méritos.

Si el Valencia había recuperado efectivos para este partido, el Betis se presentó en Mestalla con siete ausencias: Ríos, Kowalczyk, Ureña, Jaime, José Mari, Vidakovic y Cañas. Serra Ferrer echó mano de los quince disponibles y se resignó a su suerte. Y sus jugadores no le fallaron. En la primera mitad, el Betis salió decidido a recuperar el terreno perdido ante el Barça. Los béticos fueron quienes hilvanaron los mejores ataques. Hasta cinco ocasiones se contabilizaron en total, tres de ellas que fueron salvadas por la defensa in-extremis. Luis Aragonés se desgañitaba en el banquillo intentando corregir las posiciones de su equipo. Las consignas llegaron tarde porque a los 25 minutos el Betis trenzó un contra golpe letal. Oscar Arpón encaró la meta de un desesperado Zubi y cedió un balón muerto que Pier sólo tuvo que acompañar hastá el fondo de las mallas.

El técnico valencianista insistió en la corrección de las posiciones y mandó presionar en el centro del campo y entrar en las bandas. Quince minutos después llegaron los frutos en la única ocasión con verdadero peligro de los valencianistas. La pelota quedó sin dueño en la frontal del área. La defensa bética dudó y aparéció entonces la figura espigada de Gálvez que fusiló de un fuerte disparo la meta defendida por Jaro. Hasta la conclusión de la primera mitad y con el empate a uno, ambos equipos se limitaron a entretener el balón. Luis Aragonés encaró el camino de los vestuarios con cara de circunstancias. La bronca parecía segura.

El Valencia retornó al campo más motivado. La decoración cambió entonces por completo. Los valencianistas pasaron de ser dominados a controlar el partido. Las ocasiones de gol fueron de su parte. Ferreira tuvo al alcance la victoria, pero su testarazo se estrelló en el palo. Posteriormente, los valencianistas siguieron apretando, sin que les importara demasiado la expulsión de Camarasa. Sus intentos no lograron ahogar a su rival, que seguía defendiéndose ordenadamente.

Luis Aragonés se jugó entonces el todo por el todo. Dio entrada a Viola, que salió dispuesto a redimirse con su afición tras su polémico anúncio de que quería regresar a Brasil porque no le pagaban. En los pocos minutos que estuvo sobre la cancha, el brasileño demostró que la pólvora que lleva en sus botas no está agotada. No tuvo fortuna. El tiempo se iba consumiendo y se acercaba el final. El miedo se apoderó entonces de ambos equipos, que estuvieron más pendientes de resguardar su portería que de intentar un ataque a la desesperada. Curiosamente, fueron los los béticos quienes tuvieron el triple a su alcance, pero el larguero repelió el zapatazo de Menéndez. Con el "ay" en el cuerpo de aficionados y jugadores, Brito Arceo, que estuvo muy mal, indicó el final.