El 3 de octubre de 1935, el presidente del Valencia FC, Adolfo Royo Soriano, presentó su dimisión. Luis Casanova Giner, en calidad de vicepresidente, pasó a ocupar la presidencia de forma provisional. En la asamblea general, celebrada el 3 de noviembre, se eligió por aclamación a Francisco Almenar Quinzá como máximo mandatario del club. Luis Casanova permaneció en la vicepresidencia de la nueva junta.

Fallece un gran presidente
El 7 de marzo de 1936, Francisco Almenar Quinzá, presidente del Valencia FC, fallecía repentinamente en su domicilio. El señor Almenar era una persona muy querida y respetada en Valencia, pues había dedicado muchos años de su vida al club, donde ocupó diferentes cargos directivos e incluso había diseñado y dirigido el proyecto de construcción del campo de Mestalla. Su sepelio se convirtió en un homenaje popular de sentimiento y reconocimiento a su figura, en el que participaron también los jugadores de la plantilla valencianista, recién llegados de Pamplona, donde habían disputado un partido de Liga. Francisco Almenar Quinzá ha sido el único presidente del Valencia que ha fallecido en el ejercicio de su cargo.

El 11 de marzo, la junta directiva acordó celebrar un homenaje en su honor, y decidió no cubrir la vacante de la presidencia hasta una próxima junta general. Su puesto sería asumido, de forma interina, por Luis Casanova Giner. Cuatro días más tarde, Valencia y Athletic de Bilbao manifestaron su duelo por el óbito presidente valencianista con un minuto de silencio antes del inicio del encuentro correspondiente a la 17ª jornada de Liga en Mestalla. El 28 de junio, en asamblea general, se acordó entregar amplios poderes a Luis Casanova Giner y a Rafael Bau García para que nombrasen un órgano de gobierno del club a fin de designar al nuevo presidente. Pocos días más tarde, estalló la Guerra Civil Española.

Nueve fichajes más cinco canteranos
Ya en ámbito estrictamente deportivo, se incorporaron a la disciplina valencianista un total de nueve jugadores. Llegaron Hilario Marrero, procedente del internacional de Madrid, Carlos Petreñas, del Athletic de Bilbao, Lelé Santiago, del Arenas de Guetxo, Doménech y Moreno, ambos del Espanyol, Saló, del FC Barcelona, Bermúdez, del Athletic de Madrid y Arín, del Unión Club de Irún. Además, hasta cinco canteranos ascendieron al primer equipo: Nieto, Torrentí, González, Ferrando y Lerma.

Pero, sin duda, la incorporación más importante de la temporada fue la del extremo derecho Amadeo Ibáñez, procedente del Gimnástico FC. Llegado al club de Mestalla a la edad de 19 años, se mantuvo durante otros 16 años en el primer equipo, incluido el intermedio de la guerra, y muchos más posteriormente como técnico del Mestalla, segundo entrenador o delegado hasta su fallecimiento en acto de servicio. Miembro numerario de la delantera eléctrica, Amadeo Ibáñez es mucho más que un jugador en la historia del Valencia.

Pasarín se retira
La baja más importante de la temporada fue la de Luis Casas Pasarín. Tras seis años de servicio a la camiseta valencianista, recibió la baja y se incorporó al Ministerio de Trabajo como funcionario, pero la afición le pudo más y acabó jugando en el Nacional. Tras la guerra se sacó el título de entrenador y entrenaría al Valencia entre 1947 y 1948, consiguiendo ganar una Liga. También causaron baja en el primer equipo Domingo Torredeflot, que fichó por el FC Barcelona, el meta magiar Atchs, el también portero Ramón Nebot, que marchó al Girondins de Burdeos francés, el Ala diestro Abdón García, que firmó con el Atlético de Madrid. Durante la temporada, una vez finalizado el Campeonato Superregional, dejaron el equipo el delantero centro Gaspar Rubio, que posteriormente sería operado de una hernia, y el medio volante Santos, que abandonó la disciplina deportiva.

Andrés Balsa, nuevo entrenador
El 8 de noviembre de 1935, dos días antes de comenzar el Campeonato Nacional de Liga, se produjo el cambio de entrenador. El gallego Andrés Balsa, que había dirigido previamente al Pontevedra y al Celta de Vigo, reemplazó a Anton Fibver, que zanjó de esta manera su tercera y última etapa al frente del equipo valencianista. Andrés Balsa se mantendría al frente del equipo durante la Guerra Civil, y en los años cuarenta ocuparía el puesto de preparador físico a lo largo de varias temporadas.

El equipo realizó una discretísima campaña
Pese a la gran cantidad de incorporaciones realizadas en la plantilla, el Valencia FC hizo una más que discreta temporada en las tres competiciones oficiales en las que participó. En el Campeonato Superregional no consiguió el título de campeón, en el Campeonato Nacional de Liga se llegó solo al octavo puesto, y en la Copa de España fueron eliminados por el Espanyol en la fase intermedia, con partido de desempate incluido.

Además de las competiciones oficiales, el Valencia FC disputó un total de 17 partidos amistosos, casi todos ellos contra equipos de la región. De todos los partidos disputados, el Valencia ganó 14 y perdió 3, marcando un total de 67 goles y encajando 20. El último partido de la temporada se celebró el 24 de junio de 1936 en Bardín, en el que el Valencia derrotó por 4-2 al Hércules, y supuso el final de un ciclo deportivo para el club, pues finalizada la temporada, los campeonatos oficiales de Liga y Copa quedarían interrumpidos a causa del estallido de la Guerra Civil.

Fallece el futbolista Manuel Santacatalina
En pleno curso futbolístico, un luctuoso acontecimiento sacudió a la plantilla del Valencia FC. El 9 de febrero de 1936, moría el centrocampista Manuel Santacatalina, a consecuencia de una pulmonía, causando un hondo sentimiento en el mundo deportivo valenciano, tanto por su calidad humana como deportiva. El entierro se convirtió en una gran manifestación de duelo, y dos días más tarde se celebró un partido entre Valencia y Gimnástico a beneficio de su familia.

Mestalla, sede de la final de Copa
Mestalla acogió esta temporada la final del Campeonato de Copa por tercera vez en su historia. En esta ocasión se enfrentaron Madrid CF y FC Barcelona el 21 de junio de 1936, bajo un sol de justicia y ante más de 20.000 espectadores. El club madrileño se impuso al catalán por 2-1, en un excelente partido donde ambas escuadras desplegaron un juego técnico de muchos quilates. El Madrid se adelantó en el marcador gracias a los goles de Eugenio y Lecue, aunque Escolá recortó la distancia obtenida por los merengues en los minutos iniciales. En la segunda parte, el Barcelona se lanzó al ataque y tuvo su mejor ocasión a cuatro minutos del final. Escolá lanzó un disparo duro y raso, pegado al poste, pero Zamora, de forma magistral, consiguió blocar el balón, evitando la prórroga. Este fue el último partido que disputó el mítico Ricardo Zamora, ya que se retiró del fútbol profesional una vez finalizado el partido, y Mestalla fue testigo de ello.

Haciendo balance
Al finalizar la temporada, y a un mes de estallar la guerra, el Valencia FC ocupaba un destacado lugar en el fútbol nacional. Hasta cuatro de sus jugadores habían formado parte de la Selección Española: Cubells, Molina, Garrobé y Bertolí. En sus primeros diecisiete años de vida, el Valencia había disputado 966 partidos, entre oficiales y amistosos, completando un balance de 574 victorias, 143 empates y 249 derrotas, con 2.839 goles a favor u 1.588 en contra. En su palmarés, figuraban ocho Campeonatos Regionales y seis subcampeonatos en sus 17 participaciones. Además, había conquistado su derecho a participar en la Copa de España en trece ocasiones, de las cuales había llegado a la final en 1934 y a las semifinales dos veces más.


Campeonato Superregional

El Campeonato Superregional se celebró tal y como había quedado establecido la anterior temporada, aunque en esta ocasión sin la participación de los equipos andaluces, a fin de evitar largos y costosos desplazamientos. Junto al Valencia FC, disputaron el torneo Gimnástico FC, Levante FC, Elche CF, Hércules CF y Murcia CF.

El equipo comenzó su andadura en el campeonato con una victoria en Altabix contra el Elche por 1-4. La alineación que presentó el Valencia en este primer partido fue: Bermúdez, Melenchón, Villagrá, Bertolí, Santacatalina, Santos, Zubieta, Rosado, Rubio, Lelé y Goibuiru. En la siguiente jornada, el Valencia goleó al Gimnástico en Mestalla con el mismo resultado, 4-1.

Lo que parecía que iba a ser un dulce paseo para el Valencia, se truncó de golpe en la tercera jornada, con una inesperada derrota por 1-2 ante el Levante. El equipo pareció perder la confianza, y perdió otros dos partidos de forma consecutiva en La Condomina, ante el Murcia (3-2), y en Bardín, contra el Hércules de Alicante (1-0).

El equipo había finalizado la primera vuelta con dos victorias y tres derrotas, y tenía que cambiar su nivel de rendimiento para poder aspirar al campeonato. Todo comenzó bien, ya que el Valencia volvió a derrotar el Elche en Mestalla (3-1) y al Gimnástico en Vallejo (1-2), pero de nuevo volvió a caer ante su bestia negra en el campeonato, el Levante, que le endosó una dolorosa goleada en el campo del Camino Hondo del Grao (6-1).

El Valencia, todavía entrenado por Anton Fibver, logró la victoria en las dos últimas jornadas, ambas disputadas en Mestalla, ante el Murcia (6-1) y el Hércules (2-1), pero no fue suficiente para lograr el campeonato que fue conquistado por el Murcia, con 14 puntos, seguido de Hércules y Valencia, con 12 y Levante, con 10 puntos. Los colistas fueron el Gimnástico, que sumó 8 puntos, y el Elce, que sólo consiguió 4. El Valencia quedó tercero debido al goal-average. Jugó un total de 10 partidos, de los que ganó 6 y perdió 4, marcó 25 goles y encajó 18. Al quedar tercero, el Valencia no logró la clasificación directa para la Copa de España, y tendría que jugar una eliminatoria previa contra el Español. Un resultado muy decepcionante para el club que acabó con la salida de Anton Fibver como entrenador del equipo.

Campeonato Nacional de Liga

El comienzo de la Guerra Civil trajo consigo el aplazamiento y suspensión de los campeonatos nacionales y, con ello, el desmoronamiento de las estructuras futbolísticas vigentes. Por este motivo, la temporada 1935-1936 tuvo un significado especial, no tanto por su interés deportivo, ni por el relieve del fútbol desplegado, sino porque fue la última de una etapa brillante del fútbol español.

El Campeonato Nacional de Liga vivió un nuevo duelo entre el Athletic Club de Bilbao y el Madrid CF, que se resolvió a favor de la escuadra vizcaína. Primó el fútbol de ataque, con 528 goles anotados, cifra que representó un promedio de 4 goles por partido. El máximo goleador de la competición fue Lángara, con 27 tantos, cuyo equipo, el Oviedo, junto a Racing de Santander y Hércules de Alicante, fueron los equipos revelación de la Liga. El Valencia, por su parte, realizó una muy discreta temporada, finalizando en octava posición, después de lograr 7 victorias y 5 empates en 22 partidos, sumando 19 puntos y quedando a sólo cuatro del descenso, marcado por el Osasuna y el Atlético de Madrid, que no llegó a bajar a Segunda, ya que al retomarse el campeonato en 1939 fue repescado para reemplazar al Oviedo, que no pudo participar al no disponer de campo de juego como consecuencia de la guerra. Por otro lado, ascendieron a Primera División Celta de Vigo y Zaragoza. La competición liguera tuvo dos interrupciones, el 19 de Enero y 13 de Febrero, por los partidos disputados por la Selección Española ante Austria y Alemania.

El Valencia inició su andadura en el Campeonato de Liga el 10 de noviembre de 1935 en Mestalla. Y lo hizo con una sensacional goleada por 5-0 al Sevilla, con tres goles de Guijarro y dos de Lelé. El Valencia formó, además de con estos dos jugadores, con Bermúdez, Juan Ramón, Iturraspe, Goiburu, Stors, Melenchón, Lerma, Bertolí y Amadeo. Fue un resultado muy esperanzador, pero poco duró la alegría, ya que el Valencia perdió los tres siguientes partidos de forma consecutiva, en Santander contra el Racing (2-6), en Mestalla contra el Barcelona (1-2) y en Chamartín contra el Madrid (1-4). A partir de aquí, y hasta el final de la primera vuelta, el equipo sólo fue capaz de sumar dos victorias, contra Osasuna (2-1) y Español (1-0) en Mestalla; y dos empates, en Madrid contra el Atlético (2-2) y en casa contra el Oviedo (1-1). El resto de partidos se saldaron con derrotas: 2-3 en San Mamés, 0-2 contra el Betis y 2-0 en Bardín.

El Valencia cerraba la primera vuelta en la novena posición, con ocho puntos y a sólo dos del descenso. El panorama que se presentaba era pesimista, sin embargo, el equipo fue capaz de sacar su mejor versión y logró dos victorias consecutivas, ante el Sevilla en casa (2-1) y en El Sardinero contra uno de los equipos revelación, el Racing de Santander (1-0). Después llegó un meritorio empate sin goles en Les Corts ante el Barcelona, que dejó al equipo en la zona media de la tabla, antes de cosechar una dolorosa derrota ante el Madrid en Mestalla, que remontó un gol de Goiburu en los últimos minutos del encuentro (1-2). El último tramo liguero fue muy irregular, ya que en los últimos siete partidos el Valencia obtuvo dos victorias, en San Juan contra Osasuna (2-3) y en Mestalla contra el Hércules (5-2), y dos empates en Mestalla, contra el Athletic (1-1) y el Atlético (1-1). Los otros tres partidos terminaron con derrota valencianista, en Heliópolis contra el Betis (3-0), en Sarriá contra el Español (3-2) y en Buenavista contra el Oviedo (4-3) en el último partido del campeonato.

En resumen, una trayectoria muy irregular que finalizó con un Valencia en octava posición y pasando apuros para salvar la categoría. El equipo consiguió 36 goles repartidos de la siguiente manera: Lelé (10 goles), Vilanova, Amadeo y Guijarro (5 goles), Goiburu (4 goles), Arín (2 goles), Conde, Bertolí, Rosado y Lerma (1 gol).


Copa de España

Si el sistema empleado en la temporada anterior para disputar la Copa Presidente de la República resultó complicado, el del año 1936 le superó ampliamente en complejidad. Disputaron la fase final del torneo:

1) Los vencedores de los seis Campeonatos Superregionales: Oviedo FC, Madrid FC, Arenas de Guetxo, FC Barcelona, Hércules CF y Sevilla FC.
2) Los equipos que jugaron la fase de ascenso a Primera División: Murcia, Zaragoza, Celta de Vigo, Gerona y Jerez.
3) El Athletic Club de Bilbao, clasificado de oficio como Campeón de Liga.
4) Una serie de equipos que obtuvieron su pasaporte tras participar en una eliminatoria previa, organizada en torno a seis grupos con tres y/o cuatro equipos cada uno. según proximidad geográfica, y que se dilucidaron en una semana mediante sistema de liga. A los primeros clasificados de estos grupos (Deportivo de La Coruña, Sporting de Gijón, Baracaldo CF, CD Sabadell, Levante FC y Malacitano) se les unieron los campeones de la zona Norteafricana-Canarias y de Baleares: Athletic Tetuán y Mallorca. Estos ocho clubes se enfrentaron entre sí en eliminatorias directas, al final de las cuales únicamente quedaron en liza Sporting de Gijón y Sabadell. Ambos quedaron emparejados junto a los equipos de Primera División que todavía no habían certificado su pasaporte para disputar la competición de Copa.

Estas fueron las eliminatorias que dieron acceso a la fase final de la competición: Racing-Osasuna, Betis-Sabadell, Español-Valencia y Sporting de Gijón-Athletic de Madrid. Los equipos vencedores de estos enfrentamientos directos fueron Sporting de Gijón, Betis Balompié, Español y Osasuna. En consecuencia, dieciséis equipos disputaron los octavos de final de la Copa de España, en los que no estaría el Valencia: Athletic de Bilbao, Hércules, Madrid FC, FC Barcelona, Sevilla, Oviedo, Arenas de Guetxo, Murcia, Zaragoza, Celta de Vigo, Gerona, Jerez, Sporting de Gijón, Betis, Español y Osasuna.

Así pues, la participación del Valencia en la Copa de 1936 resultó más corta de lo esperado, ya que cayó eliminado en la ronda previa a los octavos de final a manos del Club Deportivo Español de Barcelona. El equipo mantuvo la mala línea en juego y resultados de toda la temporada, y quedó apeado por un equipo que incluso se había clasificado en Liga un puesto por debajo del Valencia.

El primer partido se disputó el 26 de abril de 1936 en el campo de Sarriá, y el Español derrotó al Valencia FC por 1-0. Andrés Balsa alineó a Cano, Torregaray, Juan Ramón, Bertolí, Iturraspe, Villagrá, Doménech, Goiburu, Amadeo, Lelé y Lerma. La eliminatoria no parecía dificil, pero lo fue. El 3 de mayo, Mestalla acogió el encuentro de Vuelta. El Valencia venció 4-3, logrando con ello forzar un partido de desempate. El jugador Hilario Marrero debutó en este partido y consiguió dos goles. Los otros dos goles fueron obra de Goiburu, de penalty, y Doménech. La eliminatoria había quedado igualada 4-4, por lo que se tuvo que jugar un partido de desempate en terreno neutral.

El 5 de mayo, en el campo de Torrero (Zaragoza) tuvo lugar el partido de desempate. La escuadra valencianista se despidió prematuramente de la temporada al caer derrotado por 3-2 en la prórroga. El partido había finalizado con empate a dos tantos y el Valencia se vio perjudicado con la expulsión de Iturraspe en el minuto 111, así como por la lesión de Amadeo, que permaneció fuera del campo durante 20 minutos. Jugaron por el conjunto valenciano: Bermúdez, Torregaray, Juan Ramón, Bertolí, Iturraspe, Conde, Doménech, Lelé, Vilanova, Hilario y Stors.

El Valencia había quedado eliminado de la Copa en la fase previa. Mestalla acogió esta temporada, por tercera vez en su historia, la final de la competición, que enfrentó a Madrid CF y FC Barcelona el 21 de junio de 1936, con victoria final de los madridistas por 2-1.

Plantilla de la temporada 1935-1936

Presidente Adolfo Royo Soriano, Francisco Almenar Quinzá y Luis Casanova Giner
Entrenador Andrés Balsa
Porteros Cano, Bermúdez
Defensas Juan Ramón, Melenchón, Moreno, Saló, Santacatalina, Torregaray
Medios Bertolí, Blasco, Hilario, Iturraspe, Lelé, Petreñas, Tonín Conde, Villagrá
Delanteros Amadeo, Arín, Costa, Doménech, Goiburu, Guijarro, Jaso, Lerma, Rosado, Stors, Vilanova, Zubieta