Inicio del partido

0'

Descanso

45'

SachettiMannini

50'

Bertarelli

51'

Voro GonzálezFernando Giner

58'

BusoBonetti

64'

Jose Manuel TárragaQuique Flores

65'

Carlos ArroyoEloy Olaya

70'

Juan SánchezÁlvaro Cervera

70'

CoriniBertarelli

75'

Fernando GómezAsist: Leonardo de Araujo

79'

Carlos Arroyo

90'

Final del partido

91'

Una moneda decidió el campeón del Naranja tras vencer el Valencia por 2 goles a uno a la Sampdoria y empatar a goles y puntos con el Dinamo de Moscú. La suerte dio el título a los rusos. Al inicio del encuentro se guardó un minuto de silencio por las víctimas del accidente de Torreblanca, en Castellón.

En la primera parte, el Valencia desarrolló un juego muy lento, falto de movilidad en ataque y sin apenas profundizar por las bandas. Leonardo y Alvaro jugaban muy retrasados dejando desvalido a Eloy, solo en punta. Los primeros veinticinco minutos fueron muy aburridos y de constante bostezo. El equipo italiano se limitó a defenderse, aunque se vieron visos de gran calidad y compenetración en la pareja formada por Walker y Vierchwood, que dominaron a placer, trenzando con gran maestría los ataques de la Sampdoria. Ya en los últimos minutos antes de llegar al descanso el juego se animó, circunstancia que agradeció un desangelado público.

Ya en el segundo período, los italianos salieron a presionar desde el principio. En el minuto 13, y tras un saque de banda, se produce un fallo de Fernando en defensa que no logra atajar la internada de Lombardo y Bertarelli remata, consiguiendo el primer gol de la Sampdoria ante la pasividad de toda la defensa che. El capitán italiano, Mancini, pudo sentenciar el encuentro, pero desperdició una ocasión de oro en el minuto 17, que salvó in extremis Sempere. Pero corría el minuto 33, cuando Leonardo se interna por la banda izquierda y después de un quiebro centra con la zurda para que Fernando remate de cabeza consiguiendo el gol del empate.

Pero cuando el partido ya expiraba y a falta de segundos para el pitido final, Arroyo se escapa por el centro y de un fuerte disparo logra superar a un descolocado Nuciari. Fue el gol que propició el desenlace del Torneo Naranja con el lanzamiento de una moneda al aire, que le dio el título al Dinamo de Moscú.