Inicio del partido

0'

Descanso

45'

Santolaria

50'

Jesús Navarro

75'

José VilanovaAsist: Jesús Navarro

78'

Montañés

81'

Final del partido

90'

En el terreno que en la prolongación de la calle de Herrero tiene el C.D. Castellón, se ha jugado el partido de más interés del Campeonato valenciano: el que enfrenta a los equipos titulares de Castellón y Valencia. La lucha, en todo momento competida y emocionante, ha tenido un primer tiempo magnífico en que, sobre todo por parte del equipo castellonense, se ha realizado un juego maravilloso, que, hablando sinceramente, hemos de confesar ha constituido un verdadero encanto. Y una segunda parte en que por una desdichadísima e incomprensible actuación arbitral del colegiado Melcón, el partido ha ido degenerando, llegando a convertirse en una contienda enconadísima, propicia a todo género de brusquedades, incidemtes y escándalos.

En el campo se registra un lleno. Pasados los primeros momentos del partido, los destinados a indecisiones y nervisismos, el Castellón va imponiéndose poco a poco y jugando con insuperable maestría va poniendo cerco a la meta del Valencia haciendo presenciar una mala tarde para los colores valenclanistas. Ello trae consigo un freekick contra el once blanco, que tira Bertrán metiendo el balón en la red de Nebot, pero Melcón anula el tanto por considerar que el jugador Montañés había incurrido en offside.

El juego se estacione con frecuencia frente a los dominios de los "merengues" pero la delantera albinegra se halla poco afortunada en el tiro y las múltiples ocasiones que el equipo castellonense trata de desbordar la resistencia del marco contrario, las pierde lastimosamente. El descanso llega, pues, sin que el marcador haya funcionado ni una sola vez.

La segunda parte se inicia con un excelente avance del Valencia rematado por Picolín con un tiro a las nubes. La reacción del Castellón es rápida, y a los minutos de empezado este segundo tiempo, un córner contra el Valencia excelentemente ejecutado por Ballester, da ocasión a Santolaria para rematar el primer goal de la tarde, acogido por el público con una gran ovación.

El calor imperante en esta cálida tarde otoñal, y los desaciertos que Melcón está cometiendo, van poco a poco haciendo que el partido vaya perdiendo las características que el magnífico primer tiempo tuvo y los brusquedades que ahora van apareciendo, cada vez con más intensidad, van desluciendo la lucha, que llega a degenerar ostensiblemente.

Melcón, en plan verdaderamente incomprensible, anula al Castellón dos nuevos tantos, sin que hasta ahora hayamos podido saber por qué, y esto viene a caldear los ánimos, excitando el nerviosismo de la generalidad de los espectadores. A los treinta minutos, Navarro, en una excelente arrancada, logra burlar la vigilancia del trío posterior castellonense, y un excelente shot con que termina su jugada hace aparecer el empate en el marcador.

Breve desconcierto castellonense, y nuevo tanto valenclanista, que hace aparecer como probable triunfador al que por todos conceptos hubo un momento que se calificó de seguro vencido... El tiempo escaso que cesta para que el partido acabe, hace que el nerviosismo del público alcance proporciones gigantescas, más afortunadamente el sedante de un goal castellonense que consigue Montañés, llega a tiempo de evitar graves trastornos en los isleños nerviosos. Solo faltan cuatro minutos para que el partido llegase a su final y sin embargo una brutalidad de un jugador valenclanista (Abdón), aun da lugar a un incidente violento, que queda como colofón de este encuentro entre valencianistas y castellonenses, encuentro que pudiendo ser modelo de partido noblemente disputado no pasó de ser un partido más de campeonato, al uso y costumbre de estas latitudes.

El mejor jugador de los veintidós sobre el terreno, fué el exterior derecha del Castellón, Ballester, que tuvo una actuación maravillosa tal, que produjo verdadera sensación. Es éste uno de los nuevos elementos conseguidos por el equipo local en esta temporada. Le siguieron en méritos sus compañeros Pascual, Santolaria, Gómez, Bertrán, y a ratos los zagueros. Por los valencianistas, los más destacados valores fueron Torredeflot, Conde II, Torregaray y en ocasiones Melenchón. A Nebot, le pasaron los dos goals consiguientes. El arbitraje de Melcón, verdaderamente detestable.