Ficha de partido: 14.09.2003: Valencia CF 1 - 0 Málaga CF

Ficha de partido

Valencia CF
Valencia CF
1 - 0
Málaga CF
Málaga CF

Equipos titulares

Timeline del partido

escudo local
Inicio del partido
0'
escudo visitante
Javier Garrido
15'
David Albelda
20'
Rubén Baraja
30'
Josemi
43'
Carlos Marchena
44'
Insúa
44'
Descanso
45'
Manu
54'
EdgarInsúa
60'
LuqueGerardo
60'
Fabián CanobbioMiguel Ángel Mista
62'
Pablo AimarVicente Rodríguez
62'
Valcarce
76'
Pablo Aimar
80'
Diego AlonsoManu
85'
Momo SissokoRicardo Oliveira
86'
Final del partido
90'

Estadio



Nombre: Mestalla
Aforo: 55.000 espectadores
Ubicación: Valencia (Valencia) 
Inauguración: 20/05/1923

Rival: Málaga CF

Records vs Málaga CF

Máximo goleador: Waldo Machado (6 goles)
Goleador rival: Orozco (3 goles)
Mayor victoria: 6 - 1 (31.01.2004)
Mayor derrota: 0 - 4 (24.11.2012)
Más repetido: 1-0 (12 veces)

Crónica

Con el juego muy pocos disfrutaron pero todos sí que lo hicieron con la victoria. El Valencia ha recuperado el tono que en el pasado tantas satisfacciones le produjo, es decir, juego rayando el aburrimiento pero obteniendo la máxima rentabilidad de los pocos goles que marcaba.

Transcurridas tres jornadas de Liga (Valladolid, Osasuna y Málaga), el combinado que dirige Rafa Benítez ha sabido sumor siete puntos, marcando un gol en cada encuentro. Un registro digno de ser resaltado. El público se sintió feliz cuando Marchena resolvió de una forma efectiva una situación confusa creada en el área del Málaga. Los unos se felicitaron con los otros. Era el mejor momento de los vividos en la primera fase y, además, se producía en el minuto 43, cuando el árbitro ya se estaba planteando señalar el descanso y el Valencia llegaba con una pobreza futbolística que llegaba a alarmar.

El gol de Marchena sirvió para muchas cosas: tomar la iniciativa en el marcador; que los jugadores se retirasen al vestuario entre aplausos cuando quizás se adivinaba una división de opiniones; y transmitir tranquilidad a los aficionados más inquietos y desconformes con el juego precipitado y embarullado de su equipo. En definitiva, se fueron al des canso dejando la sonrisa en la grada y este hecho tenía mucho mérito, dado que en el terreno de juego las manifestaciones realizadas habían sido mínimas y de escaso valor. Quizás nos quedamos con un remate de Oliveira que Arnau paró sobre la misma línea o un potente disparo desde cerca de Vicente que el mismo Arnau despejó a córner con dificultades.

En el resto de las acciones era un querer y no poder. Se demostraba superioridad y mejor manejo del balón pero no existía la continuidad que se precisaba. El Málaga, de salida, renunció a las posibilidades que en el juego ofensivo podría tener su equipo. Lo dejó todo o casi todo para Salva, para que la voluntad y el orgullo de éste resolviese las situaciones de gol, sin embargo, no sólo no se crearon sino que el ex delantero valencianista quiso estar en los primeros minutos en todos los lugares y acabó esta primera fase hundido sobre el césped de Mestalla, sin punta de velocidad y viendo como Marchena y Pellegrino le ganaban siempre la acción.

El problema del Valencia en cuanto a la creación del juego no sólo es congénito, sino alarmante. No hay forma de resolverlo y de ahí el gran mérito del gol de Marchena, que además llegó en un instante crucial. De salida Rafa Benítez renunció a situar a Pablo Aimar sobre el césped de Mestalla. Una decisión arriesgada por cuanto el centrocampista argentino está cuajando el mejor inicio de temporada desde su fichaje por el Valencia.

El público se impacientó con la decisión de su técnico. El aficionado quiere a Aimar porque no sólo es efectivo para el equipo sino que encima crea espectáculo. Hubo que esperar a los últimos veintinueve minutos para verlo en acción. En realidad, poco tiempo pero el suficiente para observar los cuatro detalles que este jugador siempre tiene tiempo de ofrecer. Con su presencia se mejoró, de la misma manera que Oliveira volvió a demostrar que es un jugador vertical de cara al gol, con desparpajo para disparar desde cualquier posición pero se encuentra necesitado de una mayor fortuna. Frente al Málaga disparó en cuatro ocasiones, con fuerza y peligro pero sin encontrar el camino apropiado.

Pese a la eficacia demostrada, el equipo de Rafa Benítez mantiene muchas lagunas en sus movimientos. Da la sensación de que falta sincronización y carácter en las acciones que se protagonizan. Al público le cuesta entrar en el partido, tarda en conectar, quizá porque son muy pocas las vibraciones que le transmiten desde el terreno, unos jugadores con mucha voluntad pero también con dudas. Frente al Málaga hubo que esperar a una serie de parciales decisiones del árbitro Pérez Burrull para que los aficionado se levantasen de sus asientos y prestasen el apoyo que la ocasión requería.