Ficha de partido
Valencia CF
3 - 0
Leeds United
Equipos titulares
Sustituciones
Timeline del partido
Inicio del partido
0'
Juan SánchezAsist: Gaizka Mendieta
17'
Juan Sánchez
18'
Descanso
45'
Juan Sánchez
47'
Gaizka Mendieta
50'
Pablo Aimar
61'
Vicente RodríguezKily González
64'
Didier DeschampsPablo Aimar
69'
Miguel Ángel AnguloGaizka Mendieta
73'
Alan Smith
91'
Final del partido
92'
Estadio
Rival: Leeds United
Records vs Leeds United
Máximo goleador: Juan Sánchez (2 goles)
Goleador rival: Mike O'Grady (1 goles)
Más partidos: Vicente Guillot (4 partidos)
Mayor victoria: 3 - 0 (08.05.2001)
Mayor derrota: 0 - 2 (08.02.1967)
Más repetido: 1-1 (2 veces)
Crónica
Que el Valencia es en el sentido total de la palabra un equipo, no lo vamos a descubrir ahora. Ante el Leeds, en su casa, ante un enfervorizado público que llenaba las gradas de Mestalla, volvió a dar una muestra más de su mejor arma. Por eso, por su calidad, por su orden y porque tiene grandes jugadores, el Valencia está por derecho propio en la final de la Champions por segundo año consecutivo. Ya es un grande de Europa. Con serenidad y teniendo el balón comenzó el Valencia a fraguar una victoria que resultó más fácil de lo esperado. Mendieta, incansable y, como siempre, presente en las grandes citas, se acercaba una y otra vez a la banda para centrar o bien probaba suerte tirando a puerta.
Antes de que el Leeds pudiera dar alguna muestra de peligro, uno de esos centros desde la derecha lo remataba Sánchez a gol, cuando se acababa de cumplir el cuarto de hora de partido. La duda si fue con el brazo, o con el pecho. Digamos, ¿con el hombro? Sea como fuere (de ser mano, y aunque las comparaciones son odiosas, no es tan clara como la de Raúl, e incluso en televisión es difícil apreciarlo) el gol subió al marcador ante el alborozo de Mestalla.
A partir de ahí, el Leeds intentó poner un poco más mordiente a su ataque y lo consiguió cuando Kewell se activó por su banda izquierda. Y tuvo el Leeds alguna que otra oportunidad en las botas de Dacourt, Bakke... pero sin gran peligro. Y sin peligro porque Cañizares volvió a dar otra lección de seguridad. Antes del portero, allí estban, cuando Albelda, cuando Ayala, cuando Anglomá para evitar cualquier susto.
Así, y con unos minutos de oportunidades "light" para ambos se llegaba al descanso, un descanso especialmente merecido para jugadores como Aimar, que estaba en todos los lugares del medio del campo para adelante. Mestalla sabía que un gol del Leeds clasificaba a los ingleses, pero el temor duró poco, en concreto los dos primeros minutos de la segunda parte. Juan Sánchez, otra vez, pero ahora desde fuera del área lanzaba un zurdazo que se colaba junto al poste del portal defendido por Marthyn. 2-0 y Milán más cerca. Golpe crucial al partido, que ya sólo tuvo el color blanco... del Valencia.
Tan cerca como que tres minutos más tarde Mendieta, ponía el balón, también con la zurda, en el mismo lugar que lo había hecho su compañero. 3-0 y el trabajo de Mendieta premiado con un gol. Ahí se acabó el partido y comenzó la auténtica fiesta, la de celebrar público y jugadores que estarán el día 23 en la final. El primero cantando y brincando y los segundos no conformándose con la ventaja.
¿Y el Leeds? Aguantando el tipo hasta el final. Alguno preguntará por Viduka y por Smith. En el campo estuvieron, pero al australiano no se le vió y Smith se tuvo que conformar con ver cómo Cañizares recogía sin problemas alguno de sus escasos tiros. ¿Demérito suyo o mérito de una defensa, la valencianista, seria y sin fisuras? Smith, casi con el tiempo cumplido, fue expulsado por una fea entrada por detrás a Vicente, evidentemente más fruto de la impotencia que de lo trascendental de la jugada. Hubo tiempo para un tiro al palo de Sánchez y para que Cúper retirara del terreno de juego a hombres que estaban apercibidos de sanción, como Kily (uno de los menos entonado del Valencia), al que sustituyó un activo Vicente; Aimar, sustituído por Deschamps y cómo no, Mendieta, que cuando dio el relevo a Angulo se llevó la mayor ovación de la noche con permiso de la traca final de júbilo.
Antes de que el Leeds pudiera dar alguna muestra de peligro, uno de esos centros desde la derecha lo remataba Sánchez a gol, cuando se acababa de cumplir el cuarto de hora de partido. La duda si fue con el brazo, o con el pecho. Digamos, ¿con el hombro? Sea como fuere (de ser mano, y aunque las comparaciones son odiosas, no es tan clara como la de Raúl, e incluso en televisión es difícil apreciarlo) el gol subió al marcador ante el alborozo de Mestalla.
A partir de ahí, el Leeds intentó poner un poco más mordiente a su ataque y lo consiguió cuando Kewell se activó por su banda izquierda. Y tuvo el Leeds alguna que otra oportunidad en las botas de Dacourt, Bakke... pero sin gran peligro. Y sin peligro porque Cañizares volvió a dar otra lección de seguridad. Antes del portero, allí estban, cuando Albelda, cuando Ayala, cuando Anglomá para evitar cualquier susto.
Así, y con unos minutos de oportunidades "light" para ambos se llegaba al descanso, un descanso especialmente merecido para jugadores como Aimar, que estaba en todos los lugares del medio del campo para adelante. Mestalla sabía que un gol del Leeds clasificaba a los ingleses, pero el temor duró poco, en concreto los dos primeros minutos de la segunda parte. Juan Sánchez, otra vez, pero ahora desde fuera del área lanzaba un zurdazo que se colaba junto al poste del portal defendido por Marthyn. 2-0 y Milán más cerca. Golpe crucial al partido, que ya sólo tuvo el color blanco... del Valencia.
Tan cerca como que tres minutos más tarde Mendieta, ponía el balón, también con la zurda, en el mismo lugar que lo había hecho su compañero. 3-0 y el trabajo de Mendieta premiado con un gol. Ahí se acabó el partido y comenzó la auténtica fiesta, la de celebrar público y jugadores que estarán el día 23 en la final. El primero cantando y brincando y los segundos no conformándose con la ventaja.
¿Y el Leeds? Aguantando el tipo hasta el final. Alguno preguntará por Viduka y por Smith. En el campo estuvieron, pero al australiano no se le vió y Smith se tuvo que conformar con ver cómo Cañizares recogía sin problemas alguno de sus escasos tiros. ¿Demérito suyo o mérito de una defensa, la valencianista, seria y sin fisuras? Smith, casi con el tiempo cumplido, fue expulsado por una fea entrada por detrás a Vicente, evidentemente más fruto de la impotencia que de lo trascendental de la jugada. Hubo tiempo para un tiro al palo de Sánchez y para que Cúper retirara del terreno de juego a hombres que estaban apercibidos de sanción, como Kily (uno de los menos entonado del Valencia), al que sustituyó un activo Vicente; Aimar, sustituído por Deschamps y cómo no, Mendieta, que cuando dio el relevo a Angulo se llevó la mayor ovación de la noche con permiso de la traca final de júbilo.